Editorial
*Por Hugo Delgado
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A propósito del "Caso Pérsico"
Es al menos llamativa la revulsiva hipocresía que ponen de manifiesto los sectores del poder económico del país. Mientras El Fino de atrincheró en su puesto durante varias semanas, antes de tener que renunciar, cuando pesaban sobre el, no las sospechas sino la segura suposición de participación en un hecho público de terrorismo como fue el atentado a la AMIA, y Mauri lo "salió a bancar" como antes hacía con sus hombres envueltos en escándalos judiciales "El Carlos", a la zazón "su inventor".
Mientro el señor Montenegro, responsable de la seguridad de "todos los ciudadanos" de la Ciudad de Buenos Aires dice claramente que "no va a renunciar" pese a que existen 150 llamados que el espía Ciro James, el que hacía pinchaduras a miembros de Familiares de víctimas de la AMIA y otros, desde teléfonos de sus dependencias.
Mientras se sigue utilizando la doble moral disfrazada de mala memoria de llamar a ciertos vaciadores de bancos "candidatos a presidentes de clubes" y a determiandos proxenetas "productores teatrales".
Mientras se siguen horrorizando porque Maradona (que no es santo de mi devoción) se larga un exabrupto de los suyos mientras en distintos programas y a toda hora se habla de sexo de manera más o menos explícita, y se insinua que es moneda de cambio por determinadas cuestiones.
Mientras esto ocurre en nuestro país, y la oposición habla de violnecia verbal, cuando en pleno debate de las retenciones ellos mismo, o sus fuerzas de choque amedrentaban a los legisladores que pretendían cumplir con la plataforma para la que habían sido votados.
Mientras todo esto pasa, un juez de pública sintonía ideológica con el torturador Pati detiene a una persona por tener cinco (¡¡¡¡CINCO!!!!) plantas de marihuana en la caja de la camioneta.
Ese mismo juez da amplia difusión periodística al tema y el padre del detenido renuncia.
¿Por qué renuncia Emilio Pérsico? ¿por qué debe renunciar?
Si fuera funcionario del Mauri este habría dicho que "él no llevaba las plantitas" y si las hubiera llevado que "cinco o seis plantitas de mierda no son nada"
En definitiva creo que aunque políticamente se tenga cierta apariencia ofensiva en actitud política desde el gobierno, lo real y cierto es que la verdadera ofensiva la tienen los sectores que quieren seguir manteniendo sus prebendas y sus personeros.
¿Quién es Emilio Pérsico?
Tiene 60 años y proviene de la familia fundadora de Persicco y Freddo. Hombre fuerte del kirchnerismo, siempre estuvo ligado al peronismo.
Antes de asumir su cargo en el ministerio de Alicia Kirchner, Emilio Pérsico fue funcionario de Felipe Solá cuando era gobernador. La detención de su hijo Pablo, de 27 años, marcó el fin de su carrera en la función pública.
Emilio Pérsico nació el 13 de noviembre de 1948 en La Plata, pertenece a la familia fundadora de las famosas heladerías que llevan su apellido y dedicó parte de su adolescencia y juventud a encabezar actos y movilizaciones "revolucionarias".
En su adolescencia comenzó una ferviente militancia en el peronismo: a los 14 años ingresó a la UES (Unión de Estudiantes Secundarios), y luego se acercó a la Alianza de la Juventud Peronista. Durante la dictadura se exilió en Brasil, más tarde en Europa y finalmente en México, antes de regresar a su ciudad natal.
De regreso en Buenos Aires, su vida política encontró refugio en movimientos como Intransigencia y Movilización, que dirigió Vicente Leónidas Saadi, Peronismo Revolucionario y en Peronismo que Resiste, grupo con el que co-fundó la agrupación Quebracho. Desde allí, creó luego el Movimiento de Trabajadores Desocupados Evita (MTD Evita) hasta volver al PJ, sin abandonar la dirección de la agrupación piquetera. El corte de rutas y la movilización en las calles fue el sello que consolidó su metodología de lucha desde fines de la década menemista.
Pérsico se casó dos veces, tiene 9 hijos y 5 nietos. Aunque por sus venas corra la sangre empresarial que fundó las dos heladerías más exclusivas de Buenos Aires (Freddo y Persicco), el líder del MTD Evita juró en una entrevista con Crítica de la Argentina que no tiene relación “con esa parte de la familia” y que no maneja esos dulces negocios.
Junto a su par y compañero de ruta, Luis D`Elía, Pérsico fue de los principales opositores a las convocatorias de Juan Carlos Blumberg en el Congreso, defendió a capa y espada las leyes clave que sustentaron los gobiernos K, como la derogación de las leyes del perdón y se enfrentó a los dirigentes patronales del campo en plena guerra gaucha. La aprobación de la Ley de Medios fue su última batalla ganada.
En 2006 el ex gobernador bonaerense Felipe Solá lo designó como subsecretario de gabinete de la Gobernación, un virtual cargo de vicejefe de Gabinete provincial. Hasta que el lunes a la noche la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, le pidió la renuncia, se desempañaba como subsecretario de Comercialización de la Economía Social de esa dependencia. La detención de su hijo Pablo, de 27 años, cuando transportaba entre cinco y seis plantas de marihuana en una camioneta de Desarrollo Social fue el fin de su carrera en la función pública. Al menos por el momento.