Suhail Hani Daher Akel (*)
29/12/12-.Entre las mundologías ocultas, Occidente y la argucia
sionista, convirtieron al 28 de Diciembre, ‘Día de los Santos Inocentes’ en una
fecha de festejos, bromas pesadas y chacotas para evitar dar luz a la verdadera
tragedia sufrida con la masacre de centenares de niños en la tierra palestina
bajo ocupación romana-hebrea.
En el repaso del interior del cofre de la historia,
Canaan-Palestina, surge de la fusión de los cananeos, arameos y filisteos. De
ahí su nombre Filistin y filistinies que atesoran hasta la actualidad. Una las
tribus, los Jebuseos, de la genealogía palestina, en el 3500 aC. fundaron la
actual Jerusalem, llamándola Salem, Sion o Jebus. En 1850 aC, el rey cananeo-palestino
de Jerusalén, Melquisedec, bendice la llegada del mesopotámico (iraquí)
Ibrahim (Abraham) -que Dios, envió a la tierra prometida- y este, al
llegar reconoció al antecesor de Jesús, el jerosolimitano rey Melquisedec, como
Sumo Sacerdote del Dios Altísimo. La principal Orden Sacerdotal de la
Iglesia Católica Apostólica Romana, es la ‘Orden de Melquisedec’
En el 37 aC. el Imperio Romano ocupó Palestina y le
otorgó bajo su paraguas la autonomía de la ciudad administrativa de Jerusalem a
la tribu hebrea que invadió desde Egipto a Palestina en 1020 aC, entrando por
la amurallada ciudad palestina de Ariha (Jericó) con la violencia de la espada,
según lo asegura el texto Bíblico de Josué.
En ese entonces el Cesar de la ocupación impone como
rey de la ocupada Jerusalén, al hebreo Herodes, como resultante de la fusión
entre ambos poderes en la tierra prometida habitada por los nativos
filistinies.
De la axiomática tradición, el comienzo de nuestra
Era, aconteció en Palestina con el nacimiento del palestino Jesús, el 24 de
diciembre en la ciudad palestina de Bethlehem (Belén), del vientre de su madre
aramea-palestina María. El arameo en aquel momento era el idioma semítico del
pueblo cananeo, la lengua de Jesús y la raíz del actual idioma árabe.
Frente al magnánimo acontecimiento del nacimiento del
enviado de Dios en el año 1 de nuestra Era, Herodes, se siente amenazado y
amenazó con matar a todos los niños recién nacidos. Frente a esas
intimidaciones, el Arcángel hace su aparición en el sueño de su padre José
diciéndole: “Levántate, y toma al niño y á su madre, y huye á
Egipto, y estate allá hasta que yo te lo diga; porque ha de acontecer, que
Herodes buscará al niño para matarlo” (La Biblia, Mateos 2:13).
Fanatizado, el 28 de diciembre, Herodes, con iras
lanzó sus poderosas fuerzas hebreas equipadas por Roma, matando a centenares de
niños palestinos desde Jerusalén a Belén, no logrando asesinar al palestino
Jesús, que había sido protegido. Esta masacre pasó a llamarse ‘Día de los
Santos Inocentes’. Lejos de ser una fecha de profunda reflexión, dolorosamente
se convirtió en un día de tediosas estupideces.
El espejo de la trágica vivencia se repite luego de
veintiún siglos en la misma Palestina del palestino Jesús, contra los
hijos de su pueblo, perseguidos y diezmados por la herodiana ocupación sionista
israelí desde hace 64 años.
(*) - Fue el primer Embajador del Estado de Palestina
en la Argentina.
- Fue el primer
Representante de la OLP en la Argentina
- Analista internacional
sobre la situación de Palestina